Hacia la COP30: la Familia Vedruna se une por la justicia climática

De cara a la COP30, Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, que se está celebrando actualmente en Belém do Pará, Brasil, como Familia Vedruna nos unimos a la iniciativa de la UISG–USG: “Vida religiosa por la justicia climática: convertir la esperanza en acción”.  

Como Familia Carismática Vedruna, “llevamos en el corazón la situación crítica de nuestro planeta y de la humanidad en esta hora de emergencia climática”. Conscientes de la creciente brecha entre pobres y ricos, que clama por una respuesta evangélica y transformadora (“Nacer de Nuevo”, 56), sentimos con urgencia la llamada a profundizar nuestra interrelación entre nosotras/os y con la Madre Tierra con mayor humanidad, desde la mirada y el corazón del Dios de la Vida, llenas de misericordia, ternura, compasión y cuidado.

Por eso, al sumarnos al camino hacia la COP30, queremos hacerlo desde nuestra identidad y misión: como Hermanas y Laicos que, inspiradas e inspirados por el Evangelio y por el Carisma, buscamos que la esperanza se traduzca en gestos concretos, en decisiones valientes y en acciones colectivas que promuevan la justicia climática. Con la Familia Vedruna y junto a la Vida Religiosa mundial, deseamos contribuir a un futuro más justo, sostenible y fraterno para todos los pueblos y para la Casa Común.

La campaña de la UISG–USG nos invita a que, como vida consagrada nos unamos a las voces de la Iglesia y de los pueblos que exigen una conversión ecológica profunda: una que coloque en el centro la dignidad humana, la solidaridad y la justicia. Les invitamos a unirse y apoyar esta campaña firmando la declaración

Les invitamos a unirse y apoyar esta campaña, firmando el siguiente formulario:

Otras formas de apoyar son: 

  • Compartir la iniciativa
  • Movilizar a tu comunidad religiosa
  • Impulsar en tu entorno pequeñas y grandes acciones: reducir, reutilizar, reparar.
  • Repensar nuestros estilos de vida.
  • Promover la conversión ecológica.
  • Defender a quienes más sufren el cambio climático. 
  • Reclamar políticas públicas justas.
  • Apoyar procesos de acompañamiento en las comunidades más vulnerables.

Porque la esperanza se convierte en acción cuando nos levantamos juntos y caminamos unidos en defensa de la vida, de los pueblos y de nuestra Madre Tierra.