Bodas de diamante de la Hna. Isabel Raposo: 75 años de amor y misión Vedruna

La comunidad de la Casa Santa Joaquina de León ha celebrado los 75 años de Vida Religiosa de Isabel Raposo.

A las bodas de diamante se unieron desde la distancia numerosas hermanas de otros lugares, especialmente Colombia, país al que Isabel Raposo llegó en 1974 y en el que permaneció 42 años, trabajando sobre todo con mujeres, niñas y niños. Con anterioridad pasó 12 años en Venezuela llevando a cabo actividades similares.

En 2017, durante una visita a su familia, en Benavides de Órbigo (León), Isabel tuvo una caída y, por prescripción médica, no pudo volver a su comunidad El Consuelo, en Bogotá. Colombia -ha repetido insistentemente desde entonces- está siempre en su corazón.

“Sabemos cómo ha sido tu vida de entregada”, decía uno de esos mensajes de felicitación llegados desde Colombia.

“¡De qué forma te conquistaste a todas las señoras, que te aman, y todas las hermanas, que te queremos mucho y te recordamos!”.

También llegaron felicitaciones desde Vitoria, donde Isabel Raposo profesó sus votos religiosos: 

“Es una inmensa alegría”, le decía una hermana desde allí. “Me quiero unir a tu acción de gracias a Dios. Es fiesta para ti, para tu querida comunidad, y para tanta gente a la que hiciste el bien y sembraste en sus corazones el deseo de superarse, de aprender un oficio de mejorar sus familias… Y el amor a Joaquina de Vedruna, que también se lo inculcabas. Has sido una Vedruna fiel a todo dar, y muy misionera, recorriendo los lugares donde hacía falta tu presencia en Colombia. ¡Felicidades! ¡Acción de gracias a Dios! ¡Gracias por todo!»

La Eucaristía de acción de gracias fue ocasión para la renovación de la profesión religiosa de Isabel y el resto de hermanas de la comunidad, en la que, invocando a la Santísima Trinidad, al Espíritu Santo, a la Virgen del Carmen y a Santa Joaquina de Vedruna, las hermanas renovaron sus votos de castidad, pobreza y obediencia, reafirmando su consagración a Dios y su compromiso de servir en la educación, la salud y la ayuda a los más necesitados para gloria de Dios y edificación de su Reino.

Con ánimo alegre y voz fuerte, a pesar de la vulnerabilidad física, pudo escucharse con toda claridad la renovación de votos de Isabel Raposo.

Todavía quedaban algunas sorpresas en la celebración. La más destacada, la bendición del Papa León XIV con ocasión de estas bodas de diamante, enviada por el Equipo General Vedruna desde Roma.

Un poema de agradecimiento (a continuación de estas líneas) y una tarta de aniversario siguió reuniendo a la comunidad en torno a esta fiesta.

A la H. Isabel Raposo (en sus 75 años de Vida Religiosa)

Setenta y cinco años de amor verdadero,

de fe silenciosa, de servicio sincero.

Tu vida, semilla en tierra fecunda,

Colombia fue huella, y el mundo te inunda.

Isabel de sonrisa serena y firme andar,

con manos de paz y alma de altar.

Monja valiente, testigo de luz,

que a todos nos lleva un poco a Jesús.

Gracias, por tanto, por tu vocación,

por ser reflejo de compasión.

Hoy te celebramos con gratitud y honor,

mujer consagrada, sembradora de amor.

Esta noticia se compartió originalmente en la página web de la Provincia Vedruna de Europa.