Dos experiencias, dos vivencias, nacidas del corazón de quienes participaron en la celebración:
Anita Córdova, laica Vedruna Sullana
Las exprofesoras de Fe y Alegría N°18 y laicos Vedruna de la ciudad de Sullana, sentimos mucha alegría al recibir la invitación para celebrar los 25 años de la llegada de las hermanas al C.P. Nuevo San Juan.
Con entusiasmo decidimos acompañar este momento con mucha alegría.
La llegada fue muy emocionante, mi corazón se llenó de un sin número de emociones.
La celebración eucarística, celebrada por el Obispo de Pucallpa, se desarrolló con cantos propios de la Amazonía reflejando su alabanza a la tierra, a las nubes a sus Cochas y a su hermoso río. Fue significativa la presencia de los niños en las ofrendas demostrando las vivencias del pueblo, así como la participación de las comunidades cercanas que las hermanas acompañan en su labor pastoral.
La festividad terminó con un almuerzo para todos los invitados y pueblo en general, disfrutando de dulces regionales propios de Pucallpa y otros traídos de la costa norte.
Como dice Joaquina “Quisiera abrazar las necesidades de todos los pueblos”, siento que estas grandes y sencillas mujeres lo están haciendo, llevando luz a muchos de nuestros hermanos, sobre todo en educación, que es base para que los pueblos alcancen su desarrollo.
¡Gracias, queridas Hermanas por este hermoso encuentro. Estoy convencida que continuaremos siguiendo los pasos que Joaquina nos enseñó!.
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Natalia Pérez Marina, laica Vedruna Pucallpa
Desde el momento que recibimos la invitación por parte de las hermanas Carmelitas Vedruna, sentimos gran emoción y curiosidad porque la celebración se realizaría en el CP Nuevo San Juan.
El equipo de Fe y Alegría 72-Pucallpa se puso en coordinación con el grupo recién formado de laicas Vedruna para organizar la participación en este evento.
Fue un despliegue de actividades. En la víspera los ensayos de ambos grupos y el domingo el traslado por vía fluvial con el apoyo del bote de Fe y Alegría. Llegamos con tiempo para la misa a las 10:00 am. Las hermanas prepararon la entrada procesional a la Eucaristía de los diferentes grupos visitantes, que se fueron presentando al pueblo de San Juan, cerraba la procesión Monseñor Martin Quijano, Obispo del Vicariato de Pucallpa.
En la parte del ofertorio nos llamó mucho la atención una canoa hecha en madera por un morador de San Juan. Tres jóvenes la iban cargando al ritmo de una danza de la selva y la presentaron como ofrenda; dentro contenía frutas regionales como símbolo de la cosecha de sus chacras.
En el momento de la acción de gracias, se dio lectura a una carta enviada por la Hna. Pilar Jordá. Particularmente, vinieron muchos recuerdos a mi mente, desde aquel año 2008 en que la conocí de cerca cuando ingresé a formar parte de la familia de Fe y Alegría, en Pucallpa y, desde entonces, conservo su amistad. Escuchamos con mucha atención el contenido de ésta y es impresionante cómo recuerda los nombres de las personas moradoras de San Juan; a sus 93 años se la siente fuerte y nos anima a seguir en la misión. Otro detalle importante que destacar era la felicidad en el rostro de la Hna. María José Gimeno, al celebrar 25 años de trabajo constante en esta parte de la selva, la única de las 4 hermanas que llegaron a Pucallpa aquel 13 de agosto de 1999 y hasta la fecha nos sigue acompañando.
Compartir, después de la misa, fue la oportunidad para conocer un poquito más a las laicas visitantes de Sullana (Piura), que en sus comentarios contaron que se venían preparando desde el mes de mayo. Dejaron un bonito regalo, un mantel bordado para la capilla de San Juan. También conocimos a Charo Alvarado, del laicado Vedruna de Celendín (Cajamarca) y a las Hnas. Alicia Zanichelli (provincial) y Rubelia Reto (delegada).
Al día siguiente el grupo de Sullana y las hermanas visitantes, realizaron un paseo por el río para conocer una de las escuelitas donde interviene Fe y Alegría. A pesar de la lluvia que cayó en la madrugada, tuvieron la fuerza y ánimo de bajar del bote y subir una pendiente para llegar al pueblo de Libertad y conocer de cerca la escuelita. Se emocionaron mucho y valoraron el trabajo que viene realizando Fe y Alegría en esta parte de la selva, zona del río.
Una experiencia vivida en este 25 aniversario de las hermanas Carmelitas que guardo en mi corazón, mi sincero agradecimiento por la oportunidad de conocerlas y ver de cerca todo el trabajo que realizan en Nuevo San Juan y pueblos aledaños.
¡En nombre del equipo de la Red Fe y Alegría 72 y el grupo de Laicas Vedruna de Pucallpa, reiteramos nuestro agradecimiento y pedimos que sigan muchos años más con nosotros!.
Como grupo de hermanas agradecemos la presencia de quienes nos acompañaron y sentimos que los brazos de Joaquina se alargan y llegan a ellos multitud de personas.