Una bendecida reunión de mujeres para la visita del Nuncio apostólico en Baroda, India

El 26 de febrero, mientras la Familia Vedruna celebrábamos el 199 aniversario de nuestra fundación, la diócesis de Baroda celebró este día con un encuentrode mujeres, con motivo de la visita apostólica del Nuncio.

Mons. Seby, obispo de Baroda, en colaboración con la comisión de mujeres, organizó este mahasamelan (gran encuentro) para mujeres. Asistieron a este encuentro 3500 mujeres de siete decanatos de la diócesis con sus animadoras (hermanas). El tema del samelan era Sudhanya, que significa «bendita». El objetivo del encuentro era reunir a todos en sinodalidad. El Nuncio fue recibido por el grupo con un baile.

Comenzamos el samelan con una solemne Eucaristía presidida por el Nuncio Apostólico y el Obispo de Baroda. Más de cincuenta sacerdotes de la diócesis concelebraron la Eucaristía. También participaron en la Eucaristía más de 150 religiosas de distintas congregaciones de la diócesis y 150 miembros del Consejo Parroquial. El tema de la Misa fue Jesús, el agua viva: durante la Misa se representó el encuentro de Jesús con la mujer samaritana, a la que pide de beber y que es transformada por ese encuentro.

Tras el almuerzo, cada decanato dispuso de diez minutos para presentar una representación sobre los personajes bíblicos. Las mujeres de Unai presentaron la representación sobre Rut. Rut es un ejemplo de carácter, valor y fe. Asume grandes riesgos y encarna lo que significa ser fiel. Nuestras mujeres pusieron de manifiesto estas cualidades de Rut a través de su actuación.

De la región del sur de Gujarat, nuestras cinco comunidades (Bardipada, Subir, Pimpri, Ahwa y Unai) que trabajan en la diócesis de Baroda participaron con un buen número de mujeres en este megaevento único. Este samelan fue un acontecimiento significativo para nuestras mujeres. Les sorprendió ver a tantas mujeres reunidas en la fe y se sintieron muy felices de formar parte de este mahasamelan.

El Nuncio Apostólico también se reunió con los párrocos y con dos miembros del consejo parroquial. Esta reunión duró más de dos horas, e incluyó una ronda de preguntas y respuestas. También se reunió con las hermanas y los sacerdotes allí presentes. Durante esta sesión se le hicieron al Nuncio muchas preguntas diferentes sobre el Apostolado de la misión y sus retos.