Durante los días 14 y 15 de diciembre, en la casa de la comunidad en Melo se produjo el encuentro de los miembros de Familia Carismática de Uruguay con los laicos de Montevideo, Noblía y Melo, y las Hermanas Andrea, Teresita, Viviana y Lourdes.
Comenzamos nuestro primer día de trabajo con una cálida bienvenida y una oración preparada con gran creatividad, comenzando con una dramatización y una reflexión personal sobre una oración «Hoy oré por ti».
Los grupos de Laicado Vedruna de Melo y Noblía desarrollaron el tema «Familia Carismática», inspirados en un material del Hermano Antonio Botana. Como guía, presentaron carteles muy coloridos, destacando las ideas más importantes y símbolos que nos ayudaron a profundizar el tema, manos con palabras significativas como caminar juntos, animar, contagiar, evangelizar, con amor y con alegría.
Se estableció un diálogo fluido entre los laicos de las tres comunidades, recordando que pertenecemos a la Familia Vedruna y a otra mucho más amplia, la Iglesia. Se destacó la necesidad de que las diferentes comunidades se construyan sobre lazos fuertes de comunión, amistad, unión, respeto, porque son el fundamento de la familia carismática.
Vimos la importancia de nuestro laicado en la Iglesia, y la necesidad de involucrarnos y poner nuestros dones al servicio de los demás, respondiendo al pedido del Papa Francisco de unirnos en comunión con diferentes Carismas, diferentes religiones, para enriquecernos entre todos y contagiar, desde nuestra fe, a los que no son creyentes.
Profundizamos en el Documento Capitular Nacer de Nuevo y tomamos conciencia de la necesidad de acompañar a los jóvenes.
Cerramos el día con la celebración de la Eucaristía celebrada por Monseñor Pablo Jourdán, Obispo de Melo y Treinta y Tres.
La oración del domingo fue la llamada e invitación a embarcamos y subir a la barca con Jesús, remando mar adentro. Posteriormente, Marianela Lioret Suffia, coordinadora LV del país, compartió la experiencia vivida en Chile junto a todos los equipos de animación de la provincia.
El encuentro fue la oportunidad propicia para recordar los 90 años de la presencia de la Congregación Vedruna en Uruguay.
La alegría y espiritualidad de Joaquina se sentía entre nosotros al finalizar el encuentro con un compartir festivo, donde intercambiamos recuerdos, reímos, recitamos, dramatizamos y hasta danzamos, haciendo realidad el pensamiento de Joaquina que “La alegría es la principal virtud”.
¡Gracias al Buen Jesús por permitirnos hacer anualmente estos encuentros tan motivadores y enriquecedores!
Estela López y Carolina Lucas, LV Melo
