El pasado mes de junio, las 3 hermanas , Inma, Puy y Chipi de grupo Ain Karem han venido a Japón por primera vez. La visita de Ain Karem fue un evento muy esperado por nosotras en la Provincia de Japón, para celebrar un año muy especial: 75 años de Presencia Vedruna en Japón y 70 años de Fundación del Colegio Aitoku. Comenzando con la Misa de apertura del Año celebrativo, presidido por el Obispo D. Miguel Matsuura, el día 7 de junio en nuestro Colegio, el día 11 el Ain Karem han tenido un encuentro de oración con todas las alumnas de Colegio Aitoku.
Después de ese día el grupo viajó a varios lugares. Ha animado un Encuentro de oración en Hiroshima con grupo de habla española, Osaka y Tottori en grupos japoneses, Mishima y, en la región de Tokyo, a la Universidad de las HH del Sagrado Corazón en Kamakura en lengua española, Parroquia de Matsudo, en japonés y el Centro Chino en Tokio, teniendo la traductora y traducido la letra de canto en chino.
Durante la estancia, ellas han tenido dificultades para acostumbrarse al clima húmedo de Japón y han sufrido un poco con la voz, probablemente debido al cansancio del viaje. Sin embargo, a pesar de esto, se mantuvieron fuertes en todos los encuentro de oración y trataron de comunicarse con nosotras, las hermanas japonesas, y sentimos como que nos hemos conocido hace mucho tiempo . Así hemos vivido con mucha cercanía con las tres.
El domingo antes del viaje de vuelta a España, se celebró un «Encuentro de oración» en la Casa Provincial en Tarumi. A pesar de las lluvias, muchas personas participaron, incluidas hermanas mayores, cristianos de varias parroquias cercanas , ex alumnas de nuestro Colegio y profesoras y personal del Jardín de Infancia de Osaka. En la oración, nuestras hermanas de Ain Karem siempre empezaban a hablar de nuestra Fundadora Joaquina que vivió una profunda confianza en Dios, mismo en los momentos más difíciles de su vida y cómo vivió en el amor, y así comienzan a cantar una canción. Las letras en español se tradujeron al japonés y se mostraron en la pantalla, lo cual fue muy útil y la gente acompañaba muy bien. La serie de historias y canciones fue realmente maravillosa y ha tocado profundamente el corazón de las personas.
El tocar la guitarra y el canto de oración parecieron hundirse profundamente en nuestro corazón, a veces en silencio y otras veces trayéndonos poderosamente a la oración. Muchas personas que asistieron parecían estar fascinadas por la voz de Ain Karem y su forma de tocar la guitarra. El canto nos ha unido como una sola Familia Vedruna.
Lucia Taya Wakana, ccv