Ecos del Tiempo de la Creación en nuestro Documento Capitular

Alabado seas, mi Señor,

por la hermana nuestra madre tierra,

la cual nos sostiene y gobierna

y produce diversos frutos con coloridas flores y hierbas.

Cántico de las Criaturas, San Francisco de Asís

San Francisco de Asís escribió el Cántico de las Criaturas poco antes de morir, en torno al año 1223-1224: una alabanza a todos los seres de la Tierra, animados e inanimados, porque entendía que la Creación en su totalidad es una expresión del amor generoso de Dios

Todas las cosas que existen son signo y revelación del Señor: la creación tiene un valor intrínseco, propio, solo por haber sido creada por Dios. San Francisco celebraba en el cántico al sol, a la luna y las estrellas, al fuego con el que bailaba y a la tierra que lo sostenía. Expresaba la profunda conexión que sentía con todo el mundo creado al elegir las palabras “hermano” y “hermana” cuando nombraba a cada ser. 

Ese amor desmedido por todas las criaturas del planeta convirtió a su figura en referente para los movimientos ecologistas, así como patrono de veterinarios y profesionales de bosques y forestas. 

En San Francisco y su devoción por la Creación se inspiró el Papa para escribir la encíclica “Laudato Si’”, que precisamente toma el nombre de las primeras palabras del Cántico de las Criaturas. En el texto, se dirige a cada persona del planeta planteando un diálogo en torno al desafío urgente de proteger nuestra casa común, porque nos interesa e impacta a todos. 

Todos podemos colaborar como instrumentos de Dios para el cuidado de la creación, cada uno desde su cultura, su experiencia, sus iniciativas y sus capacidades

Laudato Si’

El amor de San Francisco por todas las criaturas y la preocupación del Papa por la responsabilidad colectiva de cuidar la casa común son las bases del Tiempo de la Creación; período que se cierra hoy 4 de octubre con la festividad dedicada a San Francisco de Asís. Durante estos días, la comunidad católica mundial se sumó a la familia ecuménica para proteger nuestro hogar común, y comprometernos en oración y acción. 

Uniéndonos a la invitación del Papa a participar en el cuidado de la creación, compartimos los siguientes fragmentos del Documento Capitular «Nacer de nuevo», en los que se refleja el compromiso de la Familia Vedruna con el cuidado del planeta y la promoción de una espiritualidad que integre la ecología y la justicia social.