El don de una nueva vocación: testimonio del ingreso en el Pre-Noviciado

El don de las nuevas vocaciones aporta nueva vida y esperanza a nuestra Congregación, renovando el espíritu de nuestra misión y el carisma que nos confió Santa Joaquina de Vedruna. Cada paso que dan quienes responden a la llamada de Dios llena nuestros corazones de alegría, gratitud y renovado compromiso de servicio. Acoger a nuevas hermanas en nuestra familia es un recordatorio de que la semilla del amor de Dios sigue creciendo, dando fruto en cada generación. Es una bendición que nos inspira a t nos inspira a todas a caminar fielmente juntas, unidas en nuestra consagración y dedicadas a amar y servir en nombre de Cristo. Hoy compartimos el testimonio de Marjorie «Joy» Flores, que comienza su camino como prenoviciada en la Delegación de Filipinas.


Ante todo, agradezco a la comunidad de Carmelitas de la Caridad Vedruna de Tagaytay y al Equipo de la Delegación por su ayuda y apoyo en mi camino para continuar sirviendo a Dios y siguiendo Su voluntad

El 16 de julio de 2025, me embarqué en un nuevo viaje como prenovicia, con la aprobación del Equipo de Delegación de Filipinas. Me sentí llena de emociones encontradas (nerviosismo y emoción) al dar este paso significativo hacia el cumplimiento de mi larga aspiración de dedicar mi vida a servir a Dios. También doy gracias a Dios nuestro Señor y a nuestra querida madre, Santa Joaquina de Vedruna, por concederme las gracias para continuar mi formación con dedicación y amor. Que sea una fiel hija de la Santísima Virgen María del Carmelo, fiel a mi consagración y vocación de amar a Jesús su Hijo, y una fiel hija de Santa Joaquina de Vedruna, nuestra Fundadora.

Marjorie Flores, Postulante