Jornada de oración y rendición de cuentas contra la corrupción

Las hermanas Nelly, Ivy y Eden se unieron a la concentración pacífica denominada «Trillion Peso March» (Día de la Oración y la Rendición de Cuentas) el pasado 21 de septiembre de 2025 en el Edsa People Power Monument.

La reunión no es un espectáculo político, sino una postura moral. Fue un momento de oración, solidaridad y acción contra la arraigada cultura de la corrupción que roba dignidad al pueblo filipino, agrava la pobreza; traiciona nuestro futuro como filipinos. El propósito no es desestabilizar, sino fortalecer nuestra democracia. Nos hemos reunido como un pueblo de Dios, unidos por la fe y la preocupación por el bien común. Nos reunimos para ser una señal de que el pueblo filipino, guiado por la fe, ya no será pasivo. Nos mantenemos firmes en favor de la verdad, la justicia y la renovación. Condenamos la corrupción generalizada que envenena nuestra amada nación. Estos actos inmorales privan al pueblo, muy especialmente a los pobres, de sus necesidades básicas, destruyen la confianza en los gobernantes e impiden el progreso de nuestro país.

Como Delegación, nos mantenemos firmes en la promoción y protección de la verdad y nada más que la verdad. Nos unimos a nuestros compatriotas desde nuestro papel y misión proféticos para defender la verdad, proteger y cuidar la vida. Nosotros, como comunidad y como Delegación, rezamos sin cesar para que la verdad salga a la luz y para que nuestra nación se renueve. Hacemos un llamamiento a nuestros líderes para que se mantengan fieles a su vocación de servir al pueblo filipino, dirijan nuestro país con integridad y acaben ya con todas las formas de corrupción.

Viajando juntos, reflexionamos sobre nosotros mismos para iniciar este cambio desde dentro. Nos aferramos a la esperanza de que la justicia y la verdad prevalecerán.

No todos estuvimos presentes en la manifestación del pasado 21 de septiembre, pero nuestro corazón late con cada voz que clama justicia. Nuestra alma marcha con cada filipino que se niega a doblegarse ante la corrupción. Denunciaremos a los culpables. Denunciaremos sus delitos. Y no pararemos hasta que se rindan cuentas. Nuestro silencio ha terminado. Nuestra lucha es ahora.

Hna. Marilou M. Manicad, ccv