Los desastres naturales son terribles acontecimientos que ponen en dimensión lo pequeñita que es la vida humana frente a la grandeza de la naturaleza. En esas situaciones de desamparo, desesperación y desolación, la oración es un profundo consuelo, que nos devuelve al camino de la esperanza.
Hace algunos días, en el sureste de España unas fuertes tormentas desataron unas terribles inundaciones, dejando a cientos de víctimas y miles de afectados. La solidaridad ha sido proporcional a la tragedia, dado que personas de todo el país se han volcado en asistir de muchas formas distintas. La gravedad ha sido tal que incluso el Papa Francisco ha hecho un llamamiento a la oración conjunta por Valencia y demás pueblos afectados.
Quienes se encuentran lejos geográficamente, sin embargo, pueden sentir a menudo una fuerte impotencia por querer ayudar pero no saber cómo hacerlo. Es ahí donde entra la oración: ese camino con el que contamos para acercar nuestro corazón al buen Jesús, depositar en él toda nuestra confianza en que la luz volverá a brillar, y encomendarle la ayuda y acompañamiento de todas las personas que sufren.
Hoy compartimos esta oración, para que unamos nuestra fe en forma de estas palabras de aliento, con las que enviar ánimos y esperanza a las personas que tanto sufren ahora.
Padre Celestial, creador del universo,
Hoy, pedimos tu intercesión por nuestros hermanos y hermanas que han sufrido debido
a la catástrofe de la DANA en España.
Permanece cerca de ellos en sus momentos de angustia.
Conforta a todos aquellos cuyos hogares han sido arrasados.
Consuela y fortalece a todos los que han perdido a sus seres queridos.
Llena con tu paz a los que esperan en el miedo y la incertidumbre.
Oramos por un espíritu de perseverancia y unión, especialmente para aquellos
que han surgido de los desastres naturales como cuidadores y víctimas;
que tú seas una luz resplandeciente de esperanza a medida que comienzan el camino hacia
la recuperación.
Y ayúdanos a mantenernos firmes junto a ellos en solidaridad y amor.
Te lo pedimos en el nombre de tu Hijo, Jesucristo.
Amén.
Fuente: CRS Español (adaptada)