Del 15 al 19 de enero, las comunidades Vedruna de Argentina y Uruguay celebraron su asamblea anual, uniendo esfuerzos y renovando compromisos. Este encuentro se desarrolló en la comunidad Madre Leonor Maturana, en Suipacha, que acogió a las participantes con gran alegría.
La mayoría de las hermanas asistieron de forma presencial, mientras que algunas lo hicieron virtualmente. La asamblea fue inaugurada por la delegada, Hna. Mirta Paoletti, quien, en el marco del Año Jubilar, nos invitó a revivir la apertura de la Puerta Santa. Como gesto simbólico, la Hna. Elisa Pizarro retiró el candado de la puerta, que había sido decorada especialmente para la ocasión. Luego, las participantes fueron invitadas a ingresar al salón de trabajo.

En la primera jornada, nos acompañaron dos laicos vinculados a los equipos de misión provincial: Francisco Jáuregui (Pancho) y Ezequiel Lucero. Francisco compartió su enriquecedora experiencia en el encuentro de equipos de misión realizado en Chile, mientras que ambos expresaron su vínculo con la Congregación, recordando con gratitud a las hermanas que los guiaron en su camino de fe y compromiso. También destacaron su participación en actividades de voluntariado en comunidades Vedruna de toda América Latina, calificándolas como momentos “únicos” en sus vidas.
Desde el segundo día, las participantes se abocaron a la elaboración del proyecto conjunto para Argentina y Uruguay, tomando como base el Proyecto Provincial. Este proceso inició con un diagnóstico individual y grupal, que permitió identificar fortalezas y necesidades. A partir de este análisis, se redactaron los objetivos generales, específicos y las actividades necesarias para su implementación. Fueron jornadas intensas de trabajo y diálogo, con el desafío de llevar estos proyectos a los planes comunitarios para transformarlos en acciones concretas.

Además, la asamblea incluyó la reunión de la Asociación Civil de Argentina, en la cual se designaron las nuevas autoridades para el próximo período.
Agradecemos al Buen Jesús y a Santa Joaquina por el impulso que siempre nos dan para construir comunidades sanas y sanadoras con esperanza y compromiso, desde la Sinodalidad.
Hna. Viviana Pimentel, CCV
