Día Mundial contra la Pena de Muerte: Humanidad tras las rejas

Cada 10 de octubre, el mundo celebra el Día Mundial contra la Pena de Muerte, una fecha que nos invita a reflexionar sobre la importancia de abolir esta práctica inhumana en todos los rincones del planeta. En este día, recordamos a aquellos países que aún mantienen la pena de muerte como una forma de castigo, y nos unimos en un llamado global a la abolición de esta práctica. Para entender mejor la realidad de la vida en prisión y el trabajo de acompañamiento a internos, hemos tenido el honor de entrevistar a dos Hermanas quienes realizan una misión crucial en nuestra Provincia de Europa y Provincia de África. 

Entrevista con Hermana Lourdes García

¿Cómo es la vida en la Prisión de Manresa? 

La Prisión de Manresa, también conocida como Lledoners, se encuentra a unos 5 km de Manresa, en el municipio de San Juan de Vilatorrada. En este centro penitenciario, residen alrededor de 800 a 900 personas, en su mayoría hombres, y cuenta con un módulo de enfermería. Formamos parte de un grupo llamado SEPAP (Secretariado Pastoral Penitenciaria), afiliado a la asociación de Pere Casaldáliga.

La vida en Lledoners es diversa, y para algunos, encuentra su sentido debido a los delitos cometidos. Sin embargo, para la mayoría, son las circunstancias personales y la falta de alternativas sociales lo que los empuja a un callejón sin salida. En su día a día, realizan trabajos como panadería, cocina, jardinería, huerto, y participan en actividades como clases de primaria, idiomas, gimnasia e informática.

¿Cuál es tu trabajo de acompañamiento con los internos? 

Mi labor de acompañamiento es simple pero significativa: estar presente, escuchar, acoger y respetar. Los internos agradecen enormemente este tiempo dedicado exclusivamente a ellos. Intento encontrar aspectos positivos en sus palabras, descubriendo sus posibilidades y valores, así como promoviendo una visión de perdón y amor de Dios. A veces, un simple «¿cómo estás?» les hace sentir valorados. Estas horas son verdaderos momentos de gracia de Dios.

¿Qué te enseñan las personas que están privadas de libertad?

Las personas privadas de libertad me enseñan mucho. A pesar de perder el contacto con sus familias, amigos y seres queridos, y de enfrentar la pérdida de muchas cosas, no pierden la esperanza, al menos no todos. Algunos agradecen esta situación como una oportunidad para madurar, crecer como individuos, salir de sí mismos, pensar en los demás y descubrir a Dios, Jesús y María, la Madre. Nuestra Madre Joaquima también está presente en sus vidas, y me llaman «Vedruna», lo cual es un regalo. Me enseñan que las pequeñas cosas tienen una grandeza inmensa.

En este día en que recordamos a países que mantienen la pena de muerte, ¿qué nos puedes decir?

La pena de muerte es lo más inhumano e inaceptable que existe. Por más grave que sea un delito, toda persona tiene destellos de bondad y la capacidad de cambiar su comportamiento. Las cárceles no son lugares de reeducación ni de reinserción social. Estoy completamente en contra de la pena de muerte y creo que la sociedad debería alzarse en contra de esta práctica de manera más enérgica. Debemos promover alternativas que permitan la rehabilitación de quienes han cometido errores y brindarles la oportunidad de reformarse y contribuir positivamente a la sociedad.

Testimonio en vídeo de la Hermana Rita Ada 

Además de la entrevista con la Hermana Lourdes García, también queremos compartir el testimonio en vídeo de la Hermana Rita Ada, quien nos hablará sobre su misión en distintas áreas, incluyendo la realidad de la cárcel. Su experiencia complementa la valiosa labor de acompañamiento en el sistema penitenciario y nos recuerda la importancia de la compasión y la redención en el sistema de justicia.

En este Día Mundial contra la Pena de Muerte, reflexionemos sobre la necesidad de abogar por la abolición de esta práctica y por la transformación positiva de aquellos que han cometido errores en sus vidas. La labor de personas como la Hermana Lourdes y la Hermana Rita Ada nos inspira a seguir trabajando por un mundo más justo y humano.