Haití –Compartir la vida, escuchando con el corazón

Aprovechando este tiempo de Adviento, nos encontramos con todas las personas que vamos haciendo camino en la misión Vedruna-Haití: el personal de la escuela, del centro de salud, la potabilizadora y el proyecto de los pollos. Un espacio para compartir la vida.

Si se busca una definición se podría decir que fue un “compartir con todo nuestro ser y escuchar con los oídos y el corazón”. Se hacía difícil contener las lágrimas, predominaban sentimientos de agradecimiento de podernos encontrar, de ser parte de esta familia Vedruna, pero también de impotencia, de fragilidad, de desconcierto ante la situación de inseguridad e inestabilidad en que las bandas armadas tienen el país.

Lo dividimos en dos partes. La primera, en tres momentos. En un primer momento compartimos cómo nos sentimos. Posteriormente con el símbolo de fuego, quemamos todo lo que queremos dejar en el 2023, porque sentimos que no nos ayuda, también en este momento hubo espacio para pedir perdón y reconocer errores; y por último, con el símbolo de un corazón grande y uno pequeño para cada participante, compartimos lo que queremos y necesitamos llevar con nosotras/os para el 2024.

En la segunda parte nos dejarnos iluminar por el profeta Isaías en el capítulo 61, 1-2, 10-11. El profeta nos llevó a reconocer la presencia de Dios que nos consuela, que rompe nuestras cadenas y nos invita a consolar, a anunciar la Buena Noticia a través de gestos como la solidaridad y la acogida. (Fonds Parisien, en este momento, es uno de los sectores donde las bandas armadas no han entrado, lo que facilita que lleguen muchas personas de otros barrios en que los bandidos han entrado quemando casas, secuestrando a sus gentes e inclusive dando muerte a otras)

Para finalizar, dimos gracias a Dios porque sabemos que no estamos solos, que Él nos acompaña; también, dimos las gracias por tantas personas que se solidarizan con sus oraciones y con aportes económicos que llegan a través de la comunidad de hermanas.             

Hna. Camila de Jesús, CCV