Crónica de la visita del Equipo General a la Provincia de África

Entre noviembre de 2024 y enero de 2025, las hermanas María Teresa Cuervo y María José Meira (Dedé) visitan en representación del Equipo General a la Provincia de África. 

A continuación compartimos la primera crónica de su viaje, entre los días 2 y 9 de noviembre.


Primera parada: Guinea Ecuatorial

Nuestro viaje comienza en Guinea Ecuatorial, visitando las ciudades de Bata y Añisok. 

El inicio fue agitado, ya que el día 3 de noviembre tuvimos que pernoctar en el hotel Villa Brenda de Malabo, la capital insular del país, por problemas mecánicos en el avión que nos llevaría de Malabo a Bata. La compañía aérea nos trasladó a este hotel, que era muy bonito y cómodo, y tenía unas bonitas vistas del Mar del Golfo de Guinea Ecuatorial. 

Bata

A la mañana siguiente pudimos tomar el avión a Bata, y por la ventana vimos los campos muy verdes y el volcán de la isla de Malabo. Finalmente, llegamos a nuestra casa de Bata, donde visitamos la capilla y nos encontramos con la comunidad: nos esperaban nuestras hermanas Marie Atumesa Luyinda, Rosette Kazunga Ngemba, Gilberte Kilokila Lumbemba y Adolphine Zunzu Mukala. 

El día 5 de noviembre visitamos la Iglesia de la Parroquia San Francisco Javier, donde las hermanas desarrollan actividades pastorales, especialmente con jóvenes y catequesis; y conocimos mejor la casa de la comunidad, visitando espacios como el quintal. Celebramos otra reunión con la comunidad, y terminamos el día con un paseo nocturno junto al mar. 

El miércoles 6 fue nuestro último día en Bata, y estuvimos en el Colegio Kisito Vedruna, que queda muy cerca de la casa de las hermanas, tiene más de 300 alumnos y cuenta con subvención del Estado.

Nos fijamos en los murales dedicados a Santa Joaquina que están pintados en las paredes, y fuimos recibidas por los alumnos cantando y bailando, ¡con mucha alegría! Uno de los maestros de la escuela nos dedicó unas bonitas palabras de bienvenida: 

En la búsqueda constante por la excelencia académica y humana, tendemos a ofrecer una educación integral… unas actitudes, valores morales especiales que nacen de la verdadera inspiración de nuestra madre Santa Joaquina de Vedruna.

Visitamos todos sus espacios: la sala de dirección, la secretaría, las aulas, el jardín y los espacios en construcción.

Allí nos se nos unió el Equipo Provincial de África: las Hermanas Marguerite Mbima, Pascaline Kikula y Marguerite Bwandala.

Cerramos nuestra visita a Bata con un paseo por el malecón, admirando el mar y las construcciones, como la Torre de Bata. 

Añisok

Al día siguiente nos dirigimos a Añisok con el Equipo Provincial de África, recorriendo por carretera 145 km hacia el interior del país, alejándonos de la costa. Por la ventana, el paisaje de selva bajo la lluvia llamaba nuestra atención. 

Fuimos bienvenidas a Añisok por la comunidad, y visitamos todos los espacios de la casa. Por la tarde celebramos un encuentro comunitario, momento de compartir la vida de la comunidad en misión. También disfrutamos de la visita del amigo Adum, Imán de la Comunidad Islámica de Añisok, con quienes nuestra comunidad hace un caminar conjunto de mutua ayuda y amistad.

El día 8 de noviembre, salimos temprano a visitar la Iglesia de la Parroquia San Pedro Apóstol, donde las HH desarrollan actividades pastorales: catequesis, jóvenes, liturgia y otras. 

Por fin, llegamos al Colegio Vedruna de Añisok. Tiene 512 alumnos y también cuenta con subvención del Estado. Lo recorrimos entero: la entrada, el patio, el pozo, la sala de dirección… e incluso el salón de eventos, que está aún en proceso de construcción. Nos llamó la atención la sala de informática, donde no tienen acceso a internet, pero los alumnos aprenden a utilizar los ordenadores y sus distintos programas.

Por todo el colegio, encontramos muchos murales con frases inspiradoras. Y nos fijamos en el compromiso asumido por el grupo de profesores del colegio, en proceso participativo: 

Cumplir y hacer cumplir el reglamento interno, trabajando en equipo apoyándonos mutuamente y evitando todo lo que no nos deja ser buenos docentes. 

Pasamos por aulas de distintos cursos, que cuentan con muchos estudiantes por aula, y Mariate se divirtió enseñando cantos a los niños, que participaron con entusiasmo. También tuvimos la suerte de asistir a un partido de fútbol femenino, ¡y ver cómo los alumnos lo celebraban con alegría al final!

Concluimos la visita al colegio por el patio y la Gruta de la Virgen, en la que durante el mes de mayo los alumnos hacen momentos de oración a Nuestra Señora. 

Después fuimos al Santuario de la Virgen, al lado de la Iglesia San Pedro Apóstol, donde se celebra un sábado al mes, en dedicación a Nuestra Señora. Allí participamos de la Eucaristía y tuvimos la suerte de poder escuchar al Coro de las Carmelitas de la parroquia San Pedro Apóstol. En la parroquia hay varios coros, y cada día uno distinto asume los cantos de la misa.

Al final del día nos visitó la H. Patricia, misionera, de la Congregación mexicana de HH Dominicas de la Doctrina Cristiana, quienes tienen una escuela en Ayene, cerca de Añisok y mantienen mucha amistad con nuestra comunidad. Contó de lo bueno que es participar juntas del grupo de Vida Religiosa de la región. ¡Hacen un buen caminar conjunto!

El domingo 10 de noviembre asistimos a misa en la iglesia de la Parroquia San Pedro de Añisok, en la lengua Fang, predominante en la ciudad.


Durante todos estos días, hemos cumplido el objetivo al cual nos habíamos propuesto, que era el acercarnos a la realidad de nuestra presencia Vedruna en Guinea Ecuatorial, con actitud de escucha, apertura, diálogo y compartir de la vida, abriendo nuevos horizontes para la vida-en-misión de estas dos presencias en este país. 

Estamos disfrutando mucho del intercambio cultural y de todo lo que aprendemos de nuestras hermanas africanas. Algunas cosas que nos han llamado la atención han sido: 

  • Las grandes y monumentales construcciones sin terminar y que fueron abandonadas. Forman parte del escenario de ambas ciudades por donde hemos andado. 
  • Al recibir una visita de fuera, algunos grupos de la iglesia suelen ofrecer un alimento típico como expresión de la acogida y amistad, por ejemplo, el «Envuelto de calabaza» o «anita blanca de calabaza», un plato típico de la tribu Fang, predominante en la región. Y el “fufu”, la comida básica del pueblo de la República Democrática de Congo (RDC), que consiste en maíz mezclado con harina de yuca. ¡Hasta pudimos ver cómo era preparado por Gilberte!
  • Los peinados de las mujeres africanas, por su complejidad y belleza.