Reunión que sabe a vida en familia: Joaquina nos guía al encuentro con Jesús

Un encuentro sencillo, profundo y familiar, que renueva la esperanza y fortalece la misión compartida

La Familia Vedruna en Fond Parisien, Haití, se reunió una vez más para reflexionar y celebrar la vida compartida. A la luz de la carta de Santa Joaquina de Vedruna del 23 de diciembre de 1844, quisimos reavivar el fuego del amor, renovar la fuerza de nuestra misión y dejarnos inspirar por ese amor generoso que comenzó en Vic y continúa hoy en nuestra realidad haitiana.

El encuentro se desarrolló en dos momentos de profunda interioridad. En el primero, compartimos con sencillez nuestros cansancios, desánimos y también aquellas experiencias en las que sentimos la visita del Buen Jesús a lo largo de este año. En un segundo momento, con el símbolo de una vela encendida y recordando las palabras de Joaquina —Si nuestro corazón estuviera encendido…—, entregamos nuestras fatigas, heridas y límites, pidiendo al Señor un corazón ardiente de amor.

Tras un tiempo de silencio personal y un trabajo grupal compartido, concluimos con un gesto sencillo y elocuente: una mano sobre el hombro de quien teníamos al lado, mientras rezábamos juntos:

Señor, haznos un solo corazón para servir a tu pueblo.
Que el amor generoso de Santa Joaquina siga ardiendo en nosotros.
Que nuestra misión inspire, sostenga y consuele.
Bendice a Haití, nuestros centros y nuestras familias.
Como Joaquina, queremos caminar a la luz de tu amor. Amén.

El encuentro culminó con un compartir fraterno (Ágape) y la entrega de una ración de alimentos, recibida con gratitud como regalo de Navidad por parte de las hermanas.

Hna. Camila de Jesús, ccv